30 de abril, Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido 2025
El ruido que no nos despierta también nos afecta
Manifiesto contra el ruido 2025
El miércoles día 30 de abril de 2025 se conmemora en todo el mundo el Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido. Con este motivo, la CAMPAÑA CONTRA EL RUIDO -2025- se une a la celebración con la finalidad de enviar a la sociedad un rotundo mensaje sobre el problema del ruido, la contaminación acústica y sus efectos nocivos sobre las personas y sus bienes, animales y medio ambiente.
El ruido está presente en nuestra vida diaria. El ruido no descansa ni de día ni de noche. Es el segundo factor de carga ambiental de enfermedades en Europa después de la contaminación del aire. Según un informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA) “El ruido en Europa 2020“, se calcula que una de cada 5 personas vive en zonas en las que los niveles de ruido se consideran perjudiciales para la salud. El impacto ambiental de este contaminante en Europa supone una gran molestia para 22 millones de personas, la mortalidad prematura de 22.000 personas, 48.000 cardiopatías, trastornos crónicos del sueño en 6,5 millones de personas, el deterioro cognitivo en 12.500 menores y más de 1.100 millones de personas de edades comprendidas entre los 12 y los 35 años corren el riesgo de perder la audición. La contaminación acústica provoca 4.000 hospitalizaciones y 1.000 muertes prematuras al año en España. Tal y como refiere el OBSERVATORIO SALUD Y MEDIO AMBIENTE: RUIDO Y SALUD “según la OMS las personas que usan dispositivos de audio portátiles pueden exponerse, en 15 minutos de música a 100 decibelios, al mismo nivel de sonido que una persona que trabaja en el sector industrial en una jornada de 8 horas de trabajo a 85 decibelios. Los límites de volumen del oyente típico están entre los 75 y los 105 decibelios, ¡un umbral preocupante!”.
La alteración del sueño se considera el efecto no auditivo más perjudicial de la exposición a dicho contaminante, ya que las consecuencias de no tener un sueño de calidad de forma continuada pueden ser muy relevantes en términos de salud. El ruido nocturno hace que la calidad del sueño se deteriore como consecuencia de los cambios en su estructura: tardamos más en conciliarlo, despertamos antes de lo que necesitaríamos, o pasamos menos tiempo en sueño profundo y más en fases superficiales. El ruido que no nos despierta también nos afecta.